Christchurch es una ciudad que está en las costas orientales de la Isla del Sur, en Nueva Zelanda, siendo la más grande de ella y la tercera en tamaño de todo el país. Esta población tiene a un lado una serie de colinas y en el otro el Océano Pacífico, teniendo una gran naturaleza que se extiende a su interior y que hace que sea conocida como el Jardín de Nueva Zelanda.
Si te interesa ver la faceta de jardín de la ciudad te aconsejo ir a los Jardines Botánicos de Christchurch que está en su parte central, habiendo sido inaugurado en la segunda mitad del siglo diecinueve, en el año de 1863. Este lugar lo encuentras a orillas del río Avon, rodeado por el Parque Hagley, y cada vez tiene una apariencia diferente debido a sus plantas y flores.
Estos hermosos jardines empezaron siendo un sitio muy pequeño en el que lo primero que se plantó fue un árbol de cedro inglés y poco a poco fueron extendiéndose hasta llegar a ser lo que puedes ver en la actualidad. A través de los años los pantanos y dunas de arena que estaban originalmente en este lugar fueron cambiadas en ser unas treinta hectáreas llenas de vida.
Los Jardines Botánicos de Christchurch están compuestos por diez jardines diferentes que son diferenciados por líneas de árboles, así como por extensos pastizales. En este lugar puedes ver una gran variedad de plantas exóticas y nativas del país y en sus atractivos puedes encontrar su Jardín de Hierbas, su Jardín de Rosas, y el Jardín de Rocas, entre muchos otros.
Los Jardines están abiertos todos los días desde las siete de la mañana y la entrada es totalmente gratuita. En este lugar hay dos estacionamientos, un centro de visitantes con tienda de recuerdos y un café, un restaurante llamado “la Casa del Curador“, y parque infantiles con lugares para comer bizcochos, bebidas frías y helados, entre algunos otros.