La ciudad de Túnez es la capital de la república del mismo nombre, en el norte del continente africano, y está ubicada a orillas del Mar Mediterráneo, teniendo muchos sitios de interés turístico. Uno de los más visitados es su Medina, o parte más antigua, que está en todo el centro de la población y que está conformada por históricas edificaciones y estrechas calles.
Esta parte de la ciudad ha sido declarada como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco y en ella existen alrededor de setecientos monumentos entre los que se incluyen mezquitas, madrazas, palacios, mausoleos y fuentes que datan de los periodos del Imperio Almohade y de la dinastía de los háfsidas entre los siglos decimosegundo y decimosexto. Todo este lugar cubre una extensión de 270 hectáreas y allí viven alrededor de 100.000 personas, lo que es un décimo de la población total de la capital.
Entre las edificaciones más importantes que los visitantes pueden ver en la Medina de Túnez se encuentra la Mezquita Aghlabid Ez-Zitouna o la del Olivo, que data del año 723 y fue hecha como celebración de la nueva capital; la Gran Mezquita que incluye la Universidad y Biblioteca Musulmana, y el Palacio de Bey o Dar-al-Bey que tiene diversos estilos arquitectónicos y que se dice que está construido sobre un teatro Romano.
Una de las mejores características de este sitio es que se ha conservado a través del tiempo en una excelente forma, manteniendo las características arquitectónicas y culturales que dejaron sus huellas durante siglos. Además de estos importantes monumentos, recomiendo dar un paseo por sus hermosas y estrechas calles que mantienen puertas y colores originales, así como ir a sus mercados o souqs en donde se puede sentir el ambiente local y comprar algunos recuerdos; y hasta beber té en algunos de los cafés que allí existen.
Fotografías de archer10 (Dennis), Leandro’s World Tour, Citizen59.