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El Lago Como, que es conocido originalmente en italiano como Lago di Como o Lario, se encuentra en la región de Lombardía, en el norte de Italia, y además de por sus hermosos paisajes de agua y montañas cubiertas de nieve, es reconocido por sus pequeñas poblaciones que están a sus orillas y que históricamente han sido el lugar a donde van a vacacionar personas con dinero de todo el mundo y, en la actualidad, muchas celebridades.

Esta parte del país es reconocida por sus espectaculares villas que están en sus diversas poblaciones, muchas de las que llevan allí desde las épocas romanas, y que muchos turistas sienten curiosidad en ver, así sea en uno de los tours que se pueden tomar por el agua. La mayoría de estos sitios, además de tener una arquitectura para destacar, tienen unos jardines hermosos que se mantienen así durante todo el año debido a las cualidades del clima local.
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Una de las villas que se puede ver en el Lago Como es Villa d’Este que fue hecha a principios del siglo dieciséis y que en la actualidad tiene un hotel de lujo. Este sitio junto al parque de sus alrededores se encuentran en una extensión de 100.000 metros cuadrados, y tiene un estilo renacentista patricio que encanta a sus visitantes, quienes también aprovechan para disfrutar de los varios festivales exclusivos que se presentan allí durante todo el año.

Otra villa para ver es Villa Carlota que fue hecha a finales del siglo diecisiete y que tiene unos 70.000 metros cuadrados de extensión, incluyendo su jardín que es de estilo italiano y en donde hay fuentes, esculturas y plantas que se podan para que tengan diversas formas. Luego se puede ir a la Villa del Balbianello, que es reconocida por sus jardines en terrazas y que en la actualidad tiene un museo dedicado al explorador Guido Monzino.

Por último, los visitantes no se pueden perder el ver la Villa Serbelloni, en donde está el Centro Bellagio de la Fundación Rockfeller y que tiene 200.000 metros cuadrados de extensión; y la Villa Melzi d’Eril, que tiene un estilo neoclásico, siendo construida a principios del siglo diecinueve, y que tiene un jardín de estilo japonés, varias estatuas, una capilla privada y hasta un invernadero de naranjos.

Fotografías de Nicola Guarisco, Yelkrokoyade, Jean-Christophe BENOIST, Andrzej Otrębski.