La Torre de David es una imponente ciudadela situada cerca de la Puerta de Jaffa, que sirve como entrada a la Ciudad Antigua de Jerusalén. Construida durante el siglo II a.C. con el objetivo de fortalecer un punto débil en las defensas de la ciudad, ha sido destruida y reconstruida en varias ocasiones por diferentes civilizaciones que han conquistado Jerusalén, incluyendo cristianos, musulmanes y otomanos.
Este emblemático sitio alberga objetos arqueológicos que datan de más de 2.700 años de antigüedad. En la actualidad, la Torre de David es escenario de diversos eventos culturales como conciertos, actividades benéficas, encuentros de artesanos y espectáculos de sonido y luz.
El nombre “Torre de David” se adoptó debido a su importancia histórica. Aunque las torres y fortalezas originalmente construidas por el Rey David fueron destruidas, la ciudadela conserva su legado y simbolismo.
Patio arqueológico en la Torre de David. Foto de Wayne McLean. CC.
En el interior de la Torre de David se encuentra el Museo de la Torre de David, inaugurado en 1989 por la Fundación de Jerusalén. El museo está ubicado en una serie de cámaras dentro de la ciudadela original y en uno de sus patios al aire libre se pueden observar ruinas arqueológicas de aproximadamente 3.000 años de antigüedad.
Las exposiciones del museo ofrecen una visión de los más de 4.000 años de historia de Jerusalén, desde su época como ciudad cananea hasta la actualidad. La Torre de David utiliza recursos como modelos, mapas, dibujos, videos y hologramas para ilustrar el desarrollo de la ciudad bajo el dominio de diferentes gobernantes.
Se recomienda a los visitantes ascender por las rampas de la ciudadela, desde donde se puede disfrutar de una impresionante vista panorámica de 360 grados de Jerusalén.
Además, el museo cuenta con una exhibición especial dedicada a la historia de la ciudad durante el período del Segundo Templo (516 a.C. – 70 d.C.), así como una presentación sobre la historia del pueblo judío en Jerusalén. También se puede explorar una maqueta de cómo era la ciudad antigua durante el siglo II d.C.
El museo también organiza visitas guiadas y talleres para niños y adultos, ofreciendo una experiencia educativa y entretenida para los visitantes de todas las edades.
En resumen, la Torre de David y su museo ofrecen una oportunidad única para sumergirse en la rica historia de Jerusalén, descubriendo su pasado y comprendiéndola mejor desde una perspectiva histórica, cultural y artística.
Josué Mendoza septiembre 3, 2014 a las 7:27 pm
Muy interesante. Y pensar que algún día un rey guerrero que agradaba a Dios en todo se paseaba por esas fortalezas.
Respondercarlos abril 5, 2015 a las 5:40 pm
es maravilloso entrar a la historia y ver estas ruina tan mas bellas de la
Responderhistiria de jerusalen felicidades