Corinto es una ciudad que está en la península del Peloponeso o Morea, en el suroccidente de Grecia. La parte que es más visitada de este lugar, porque también existe una parte moderna, es la de la ciudad antigua, que está a un poco más de setenta kilómetros hacia el occidente de Atenas, en ese pequeño trozo de tierra que une a Grecia con la península.
Esta población era de una gran importancia en la Grecia antigua y tuvo un papel de importancia en el trabajo misionero del Apóstol Pablo. Las ruinas de la antigua ciudad se encuentran a una corta distancia de la parte moderna y están esparcidas por toda la base de la roca Acrocorinto, y la mayoría de las construcciones que aún se mantienen en pie son de estilo romano y no griego.
Uno de los principales sitios para visitar en Corinto es el Templo de Apolo, que data del siglo sexto a.C. que está en una colina desde la que se pueden ver las ruinas del mercado o ágora de la ciudad. Siete de las 38 columnas de estilo dórico que existían en este sitio se encuentran hasta el día de hoy en buen estado, haciendo que este sea uno de los templos hechos en piedra más antiguos de todo el mundo.
También en Corinto se pueden ver algunos pilares que son las ruinas del Templo de Octavia que está dedicado a la hermana del Emperador Augusto, y representa el culto imperial de Roma, que estaba en todo el Imperio. Se recomienda visitar el manantial sagrado que está en la parte norte del foro, la Fuente de Peirene que era la mayor fuente de la ciudad en otros tiempos, el Teatro y el Museo Arqueológico de Corinto Antiguo, en donde hay varios de los artefactos recuperados del lugar.