El Parque Nacional y Reserva de la Bahía de los Glaciares es un sitio que encuentras en la parte más hacia el norte de las costas del sur de Alaska, en el noroccidente de Estados Unidos. Este lugar está entre el Golfo de Alaska y Canadá, estando a sólo unos veinticuatro kilómetros de este país vecino, y muy cerca de otros parques naturales que también vale la pena visitar como el Parque Wrangell-St. Elias.
Durante los meses de verano, Alaska Airlines tiene un vuelo diario desde Seattle hasta Juneau, desde donde puedes tomar varios aviones pequeños que prestan un servicio como de taxi que te lleva a una de las poblaciones más cercanas al parque y desde donde lo puedes recorrer. Esta es de hecho la única forma de llegar hasta allí, porque no hay caminos para vehículos en él.
El Parque y Reserva de la Bahía de Los Glaciares tiene un área total de más de un millón de hectáreas y se convirtió en Patrimonio de la Humanidad en el año de 1979. Cuando llegues hasta él te sumergirás en un mundo de nieve, hielo, montañas y pastizales que tienen la flora y fauna nativas del lugar, formando paisajes que parecen sacados de pinturas.
El Monte Fairweather es el pico más alto de todo el parque a sus 4.700 metros de altura, pero no es el único, ya que caminando por sus senderos te encontrarás con una buena cantidad de montañas y colinas, que durante la mayor parte del año, tienen sus picos cubiertos de nieve. Y de estos paisajes puedes pasar a los de los fiordos, las corrientes de agua formadas por los glaciares, y las costas con cuevas protegidas.
Entre los animales que tienes la oportunidad de ver durante el verano en el parque, se encuentras las ballenas jorobadas que regresan para alimentar a los más pequeños y enseñarles a pescar. También puedes ver ciervos, osos, leones marinos, lobos, coyotes y una buena variedad de aves. Además en este sitio puedes hacer actividades al aire libre como kayak, senderismo y montañismo, entre algunas otras.
Fotografías de markbyzewski, Alan Wu, Edward Weston, Eric E Castro.