Probablemente nos olvidemos de que la naturaleza ha precisado de casi tres millones de años para tallar esta obra maestra. Son Doong Cave es por ahora la gruta más grande del mundo y su descubrimiento es bastante reciente, concretamente hemos de remontarnos tan sólo hasta el año 2009, cuando un grupo de la Asociación Británica de Investigadores de Cuevas sondeaba a los habitantes de la zona del Parque Nacional de Phong Nha-Ke Bang, en Vietnam.
Los científicos se toparon con un lugareño que decía haber encontrado una gruta de dimensiones descomunales hacia 1991, mientras daba un paseo por las inmediaciones, pero que más tarde no supo volver al lugar.
De todos modos, el hombre acompañó a los investigadores en las prospecciones por la zona, hasta que encontraron Son Doong Cave. El espectáculo era realmente grandioso y había valido la pena propiciar el hallazgo, tanto que la National Geographic Society envió a su equipo de cartografiadores y todos pudimos ver, en 2011, las magníficas instantáneas del fotógrafo Carsten Peter.
Más de 150 cuevas interconectadas, con estalagmitas de 70 metros de altura y ríos que recorren las entrañas de la tierra. Sin duda un buen reclamo para aventureros y turistas. Sin embargo, Son Doong no sólo es tremendamente inaccesible y se ha de estar muy preparado para bajar a ella; las autoridades vietnamitas han limitado el permiso para acceder a la gruta a unas 200 personas por año.