Museo Arqueologico de Hatay 1
Antioquía, que es llamada originalmente en turco Antakya, es una ciudad que está en el sur de Turquía, en la provincia de Hatay, y que tiene una larga historia que pasa por uno de los primeros sitios de la Cristiandad, así como por las cruzadas. Y como es evidente, tanta historia tiene que ser expuesta en alguna parte, por lo que te invito a ir al Museo Arqueológico de Hatay Antioquía.

Este museo empezó a ser construido en el año de 1934, dos años después de que se hicieran las primeras excavaciones locales que empezaron a descubrir más a fondo la historia local. Este sitio fue terminado en 1938 y Turquía tomó control de él en 1939, después de la unificación de Hatay con este país, y a través del tiempo ha sufrido modificaciones y renovaciones.
Museo Arqueologico de Hatay 4
El Museo Arqueológico de Hatay es famoso por su gran colección de mosaicos de las épocas romanas y bizantinas, muchos de los cuales son tan antiguos que datan de los siglos segundo y tercero. Estos mosaicos son tanto de la antigua Antioquía como de otros sitios como Daphne y varias villas cercanas que están también sobre el Mar Mediterráneo.

Todos estos mosaicos están expuestos de una forma en la que los puedes detallar muy bien, por lo que te recomiendo mirarlos de cerca para que veas las formas como están puestas las piedras de diversos colores, y de lejos para que veas la maravilla de las escenas. Allí hay tanto mosaicos que decoraban los suelos, como aquellos puestos como decoración en otras partes de las edificaciones, y tienen escenas que van desde aquellas relacionadas con la mitología hasta algunas de la vida diaria y de la flora y fauna mediterráneas.

La mayoría de los mosaicos tienen textos explicativos en inglés y en turco, aunque hay guías que hablan más idiomas. Pero el museo no es solo mosaicos, y también te aconsejo ver las otras exhibiciones que muestran otros aspectos de las culturas romana y bizantina, mediante objetos como monedas, vasijas, herramientas, sarcófagos y tallados, siendo el más famoso el de los dos leones que salió de una columna.

Fotografías de Maarten Sepp, Nevit Dilmen.