El centro de Polonia no es la excepción en el país en tener poblaciones con una gran historia que se ve en sus construcciones y en sus calles. Hoy recomiendo la ciudad de Płock, que está a orillas del río Vístula, siendo capital de la región de Mazovia, y que tiene una buena cantidad de edificaciones, principalmente iglesias, que muestran la historia que ha pasado por allí.
Esta ciudad fue la capital de Polonia durante el reinado de los Monarcas Vladislao I Herman y Boleslao III el bocatorcida, entre finales del siglo decimoprimero y la primera mitad del decimosegundo, de 1079 a 1138. La forma más fácil de que los turistas lleguen hasta este histórico sitio es en autobús desde la capital, Varsovia, en un viaje que tiene una duración de entre 1 hora y 50 minutos y dos horas.
La ciudad de Płock es reconocida por ser el sitio principal de la Iglesia Mariavita, que emergió de la Católica en este país, y allí se encuentra su templo principal, que data de principios del siglo veinte y que es llamado el de la Misericordia y la Caridad y que aconsejo visitar. También se puede ir a la Catedral que tiene un estilo románico temprano que ha sido modificado a través de los siglos y que está sobre una colina mirando hacia el río.
También se puede visitar el Museo de Mazovia en donde se tiene la oportunidad de ver pinturas y muebles estilo Art Deco, Stary Rynek que es la plazoleta del Ayuntamiento, el Castillo Ducal que data del siglo catorce, pero que fue reconstruido en el dieciséis añadiendo algunos detalles góticos; las calles históricas locales, el mercado del siglo diecinueve, los puentes sobre el río, el zoológico, el hermoso muelle y el paseo a orillas del río, desde donde se pueden ver varios de los símbolos locales.
Fotografías de Rommullus, Mens, Pbartosiak, Krzysztof Lisocki.