Pocos países pueden presumir de la variada oferta de panorámicas que ofrecer al visitante curioso. Perú, desde la Cordillera Andina hasta su cuota de Amazonia, se extiende como un inmenso abanico que regala cobijo a una grandiosa y espectacular plataforma de biodiversidad.
La realidad es que Perú es uno de los países con mayor cantidad de recursos biológicos del planeta y andando sus tierras, resulta fácil obtener una explicación. Hasta el ser humano tiene en la diversidad un explosivo cóctel de culturas y fusiones, desde aquellos nativos que formaron la cuna de la civilización andina hasta los componentes de la inestimable cultura criolla, la huella del mestizaje, formada por la mezcla de elementos africanos, moriscos y europeos.
La propia historia se convierte en inmensa si pensamos que los primeros vestigios arqueológicos encontrados en el país han sido datados 13.000 años a. de C. Hoy, sin embargo, los peruanos luchan por devolver al país su esplendoroso pasado, en un estado en el que las desigualdades sociales, la pobreza y la corrupción política acabaron por deteriorar la vida de la mayor parte de sus habitantes.
Sin embargo, viajar por el Perú, como era conocida esta república americana en los tiempos del brillo comercial de Potosí o Cuzco, se convierte ahora en una enorme lección de historia y geografía y experiencia turística de valor incalculable.