Las islas Molucas se encuentran en el oriente de Indonesia y hacen parte de los destinos preferidos de los turistas que llegan hasta este país por su mar y sus paisajes. En estas islas se puede visitar la de Ternate, que solía ser el lugar más importante del Sultanado de Ternate, y que está ubicada hacia la parte occidental de la isla de Halmahera, que es la de mayor tamaño de los alrededores.
La forma más sencilla de llegar hasta esta isla es en avión, en vuelos directos que salen todos los días desde ciudades como Macasar, capital de la provincia de Célebes Meridional; y Manado, que es la capital de Célebes Septentrional. También la compañía nacional marítima Pelni, tiene embarcaciones que unen a esta ciudad por mar con otras del país.
En la isla de Ternate la ciudad más importante es la que tiene su mismo nombre, que además es la más grande de toda esta región del país, y que se extiende desde el aeropuerto hasta el puerto Bastiong. La parte en la que se pueden hacer compras en ella, que es una de las actividades favoritas de los visitantes, está entre a unos dos kilómetros de la terminal de autobuses, cerca al Fuerte Oranje, hasta el puerto Ahmad Yani.
Allí también se recomienda visitar el Fuerte Oranje, que fue nombrado en honor a la familia real de Países Bajos, la Casa de Orange, y que fue construido por este país a principios del siglo diecisiete. En la actualidad este sitio sigue en pie, aunque nunca ha sido restaurado a pesar de los terremotos locales, y una parte es usada con fines militares y la otra está abierta al público.
El paisaje local está dominado por el Monte Gamalama, que es un volcán que hizo erupción por última vez a mediados del siglo diecinueve, y que alcanza los 1715 metros de altura. Los visitantes que quieran hacer actividades al aire libre pueden ir a hacer senderismo en las colinas de los alrededores, así como ir a lagunas como la del Cráter Tolire.
También en la ciudad recomiendo visitar el Palacio, la Tumba y la Mezquita del Sultán, los memoriales dedicados a los cristianos asesinados en las revueltas de los años 1999 y 2000, los grafitis en varios muros de las calles locales, y las hermosas playas como la Sulamadaha, la Jouburiki y la Afetaduma.
Fotografías de A. Rabin, Aan Kasman, joshwept, MilitaryHealth.