Es una de las aventuras más fascinantes que se pueden emprender si haces una escapada a la City. El Museo de Historia Natural de Londres procura la misma fascinación a grandes y pequeños. Da igual si vas solo, con amigos o en un viaje familiar. La diversión está garantizada gracias a un ameno viaje hacia la curiosidad sobre todo cuanto nos rodea.
Bajo la atenta mirada de Darwin, como no podía ser de otra manera, o sintiendo la más extrema pequeñez bajo los huesos mastodónticos de gigantescos dinosaurios, cada sala del Natural History Museum nos va a procurar una buena dosis de entretenimiento y muchísima información, una combinación infalible para que las horas pasen volando.
Nos tendremos que trasladar hasta la zona de South Kensington, concretamente a Exhibition Road, donde también se encuentran las sedes del Museo de la Ciencia y el Victoria and Albert Museum.
No nos queda más que disfrutar de las cinco secciones en las que está dividida tan estupenda galería de Londres: botánica, entomología, paleontología y zoología. Una macroexposición que cuenta con más de 70 millones de especímenes y objetos. La fachada y la entrada al propio edificio del siglo XIX, así como su majestuoso hall, ya nos anticipan esta imponente aventura del saber.