A pesar de que las ciudades modernas ya no tienen tanto espacio para la recreación y las zonas verdes, algunas se están ideando nuevas formas para integrarlos al escenario urbano. Una de ellas es Nueva York, en el nororiente de Estados Unidos, que tiene un nuevo parque llamado High Line, que está en lo alto de ella.
Este lugar tiene un poco más de dos kilómetros de largo y es lo que es llamado un parque linear que está en una sección elevada que ya no es usada de las líneas férreas de la ciudad y que era llamada la línea West Side. La inspiración para crear este espectacular parque fue la Promenade plantée, que es un proyecto que se llevó a cabo en París, capital de Francia, en los años noventa con mucho éxito.
El parque High Line es de servicio público y está hecho a lo largo de una línea que solía ser utilizada para trenes de carga y que es elevada, estando en medio de los edificios del llamado West Side de Manhattan. Este espacio al aire libre va desde la calle Gansevoort en el Distrito Meatpacking, hasta la calle 34 west, entre las avenidas 10 y 12.
Teniendo en cuenta que el parque es una vía elevada, hay diferentes puntos de acceso, que también hacen que no esté abierto todo el día y toda la noche. Así, en los meses de primavera y otoño, el parque está abierto de siete de la mañana a diez de la noche, en los de invierno hasta las siete de la tarde, y en los de verano hasta las once de la noche.
En los meses más cálidos es posible encontrar en este parque varios puestos de comidas y bebidas, en los que puedes disfrutar de un gran ambiente, así como diversos tipos de platos y postres. Y en todos los meses, puedes ver varias piezas de arte, así como pinturas y graffitis puestos a propósito en las paredes, con el objetivo de convertir todo este lugar en uno que sea de gran belleza, al tiempo que mantenga su carácter urbano.
Fotografías de David Berkowitz, bbaunach, Urban Land Institute, Project 1080.