Gañotes con miel

Ha comenzado la celebración de la Semana de Pasión de los católicos y durante estas fechas, al margen de procesiones, tronos, penitentes y rogativas, la tradición se compone de un extenso recetario de víveres y comidas que se convierten en esta época del año en estrellas de las mesas familiares, de los escaparates de las pastelerías, de las cartas y menús de retaurantes y, por supuesto, de los conventos y congregaciones monacales.

Hoy presentamos uno de esos productos típicos de la Semana Santa española, son los gañotes, un postre dulce muy típico de diversas zonas de la Sierra de Grazalema, en Andalucía, al sur de la Península Ibérica. Cádiz y, por afinidad, también Sevilla son las centrales en la producción de los gañotes, cuya receta obedece a la sabiduría popular y a la perpetuación de las costumbres gastronómicas artesanales.

Procesión

La costumbre indica que se debe elaborar una masa con huevo, harina, canela, azúcar, ralladura de limón y  naranja, aceite de oliva y ajonjolí. Todo trabajado con muchísimo mimo dará como resultado la materia moldeable que, transformada en una especie de churro largo, se va enrollando en una caña.

Es este punto del procedimiento el que confiere a la popular receta repostera de la Semana Santa de Andalucía, su característica forma de “twister”, que es lo más emblemático de una receta con muchísimas variantes y con la que se llegan a hacer incluso concursos entre pueblos y ciudadanos para dar con el mejor gañote de Semana Santa.

En la variedad está el gusto y nada mejor que comenzar la Semana de Pasión con un bocado de riquísimos gañotes solos, espolvoreados con azúcar o endulzados con rica miel.

Fotografías de Alejandro_Cortés, Daquella manera, Iglesia en Valladolid, cotallo-nonocot, El Pantera.
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