Ingredientes del cocido madrileño

 

No me hable usted de los banquetes que hubo en Roma,
ni del menú del hotel Plaza en Nueva York,
ni del faisán, ni los “foigrases” de paloma,
ni me hable usted de la langosta Thermidor.
Porque es que a mí, sin discusión, me quita el sueño,
y es mi alimento y mi placer,
la gracia y sal que al cocidito madrileño
le echa el amor de una mujer.

Es el primer párrafo de la célebre copla -compuesta por los maestros Quintero, León y Quiroga– que popularizara el coplero Pepe Blanco, en los años 40.

El “Cocidito Madrileño”, encerraba en su tonada todo un homenaje al plato más famoso de la cocina de Madrid. Una receta que tiene su origen en la “adafina”,una comida que entró en la península con la llegada de los judíos a España, que era preparada como anticipo del Sabbath, pero obviamente sin derivados del cerdo (posteriormente añadidos por cristianos y judíos conversos).

Carnes

Desde entonces y hasta ahora, el famosísimo plato castizo ha hecho las delicias de pobres y ricos y hasta los más célebres reyes de la historia de España lo han tenido como tesoros de sus cocinas: Carlos I, FelipeII, Felipe III, Fernando VI y en general todos los Borbones.

Resulta un plato que se sirve en tres vuelcos: El de la sopa; el de los garbanzos; y el de la carne, conocido también como el de las viandas.

Muchos restaurantes de Madrid lo ofrecen en sus menús, tradicionalmente los martes; si bien, con el auge que la receta ha experimentado en los últimos años, son muchos quienes lo ofrecen a diario.

Son famosos, los exquisitos cocidos de Casa Botín, en C/Cuchilleros; Casa Ciriaco, en C/Mayor; Casa Lucio, en la Cava Baja; y en La Bola.

Fotografías de Tnarik y Javier Lastras.
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