La Macarena es el nombre que recibe una parte del norte de Sevilla, España, que está en ambos lados de la muralla, siendo uno de sus distritos más grandes. Aunque esta parte es reconocida por sus edificaciones históricas y por tener un gran ambiente, muchos de los visitantes llegan hasta allí a visitar la Basílica de Nuestra Señora de la Esperanza Macarena.
Esta iglesia, que es conocida simplemente como la Basílica de la Macarena, es el hogar de la virgen más venerada de toda la ciudad y que es una de las grandes protagonistas durante la Semana Santa, unas de las fechas más importantes para Sevilla. En esos días muchos devotos y curiosos llegan hasta allí para las procesiones y otros eventos conmemorativos.
La Virgen de la Esperanza Macarena es una estatua que tiene unos ornamentos espectaculares como sus ropajes, su corona de oro y unos broches que tienen incrustaciones de diamantes y que fueron un regalo del torero Joselito El Gallo. Esto es porque esta virgen es la santa patrona de los toreros, reflejando la tristeza y la esperanza.
La Basílica de la Macarena fue empezada a construir a mediados del siglo veinte, pero fue consagrada en 1966. Su edificio fue un diseño del arquitecto local Aurelio Gómez Millán, teniendo una nave con capillas a sus lados, y al entrar allí lo primero que ves es el altar mayor en donde está la virgen, que se dice que data del siglo dieciocho.
También te recomiendo ver los techos que tienen varias escenas de la vida de Jesús, las capillas laterales que tienen otras imágenes de la virgen con el niño, el Altar de la Hispanidad que tiene las representaciones de las varias vírgenes que son adoradas en latinoamérica. Y antes de irte, puedes ir al museo en donde puedes ver más a fondo la Semana Santa de Sevilla, incluyendo algunos objetos importantes por esas fechas.
Fotografías de Jbribeiro1, Logut.