Los paisajes colinas suaves cubiertas de viñedos son algunos de los más populares para los turistas que quieren viajar por el continente Europeo, y es que recorrerlos es estar casi que en plan de película. Cuando piensas en viñedos, seguramente se te vendrán a la cabeza países como Italia y Francia, pero hay otros que no te imaginarías que también disfrutan de estas vistas de tarjeta postal.
Uno de estos lugares es el llamado Goriška Brda, también conocido como las Colinas de Gorizia, que está en el occidente de Eslovenia, en el centro de Europa. Esta región tiene un poco más de cien kilómetros cuadrados, estando en la Municipalidad de Brda, y teniendo frontera con la provincia italiana de Gorizia, de dónde saca su nombre.
Esta microrregión está en las orillas del río Soča o Isonzo y tiene un agradable clima mediterráneo, que es el que favorece la cantidad y calidad de los viñedos, además de hacer que un viaje allí sea también muy cómodo para los visitantes. Una visita a este sitio la puedes comenzar con un viaje turístico en un tren a vapor desde la ciudad de Brda, que se hace en los días sábados.
Ya estando en Goriška Brda puedes visitar las diversas bodegas y sus viñedos que se dedican principalmente a la producción de vinos blancos de variedades como el Friulano, el Chardonnay, e Pinos bianco, y el Sauvignon blanc, entre algunos otros, y tintos como el Merlot y el Cabernet Sauvignon. En varios de estos lugares, además de aprender y probar los vinos, también puedes encontrar alojamiento en hermosas casas antiguas, con vistas a los viñedos.
Y por último, te aconsejo visitar las poblaciones pequeñas de los alrededores que tienen construcciones antiguas que incluyen iglesias de estilo barroco y monumentos dedicados a los caídos durante la Segunda Guerra Mundial, y que puedes visitar caminando y en bicicleta. De resto, simplemente te puedes sentar a relajarte y disfrutar del ambiente y los paisajes locales desde tu lugar de alojamiento.
Fotografías de rhobinn, Kaja.A, tomislavmedak, feelsgoodlost.