Confucio fue uno de los personajes históricos más célebres de China y fue un profesor, editor, político y filósofo, cuyas ideas siguen siendo discutidas hasta el día de hoy. Si quieres conocer un poco más de este hombre hay varios sitios que puedes visitar en el país, pero hoy te voy a recomendar ir al Templo de Wen Miao, que está en la ciudad de Shanghái.
A pesar de que este lugar es más pequeño que el Templo Original de Confucio en Qufu, su ciudad de nacimiento, y el Gran Templo de Confucio en Pekín, también tiene su encanto y muchos turistas lo visitan año a año. Además de tener una larga historia y edificaciones de gran belleza, este lugar se ha convertido en un oasis de tranquilidad en medio de la gran ciudad.
Antes del siglo decimotercero, en la ciudad de Shanghái existían sitios dedicados al estudio de las ideas de Confucio, pero a finales de este el gobierno decidió construir un sitio especial en honor al personaje. A través de los siglos, el Templo Wen Miao cambió de sitio y fue en parte dañado durante los conflictos locales, y lo que puedes ver en la actualidad es una reconstrucción o renovación de lo que quedó con el tiempo, justo para la celebración del cumpleaños 2.550 de Confucio.
Este templo está en la parte suroccidental del casco antiguo de Shanghái y está formado por tres caminos paralelos que van de norte a sur. En el primero, que es el que está más al occidente, hay altares y construcciones dedicados a la veneración y al sacrificio; el segundo está dedicado a los que estudian las ideas de Confucio, y el tercero está dedicado a la naturaleza.
Te recomiendo ir a la puerta Da Cheng que llega a un patio que tiene en su parte más hacia el norte el Salón del mismo nombre que tiene una estatua de Confucio tallada en madera. También te recomiendo ver la pagoda de Kui Xing que data del siglo dieciocho y es la estructura más antigua de todo el templo, así como ir en los domingos al vibrante mercado que se le pone enfrente.
Fotografías de Jakub Hałun, kafka4prez, kanegen, Ana Paula Hirama.
