Sooke es la población que queda más hacia el sur de la Isla de Vancouver, en el extremo suroriental de Canadá, y que poco a poco se ha ido consolidando como todo un paraíso natural en donde los amantes del aire libre y de los deportes de aventura encuentran excelentes puntos para disfrutar. Esta pequeña ciudad es un destino turístico que han podido disfrutar personas por generaciones, en especial por los parques que la rodean y su naturaleza.
Para llegar hasta allí sólo se tiene que tomar un autobús desde la ciudad de Victoria, que es el número 61 y sale veinte veces al día, en un recorrido que tiene una duración de alrededor de una hora y quince minutos. También es posible ir caminando o en bicicleta a través del Sendero Regional Galloping Goose, que está conectado a Victoria y Langford.
La mejor forma de visitar la población de Sooke es caminando por sus pequeñas y pintorescas calles, pero si se quiere ir un poco más lejos, es posible que se necesite un automóvil. Dentro de la ciudad se puede visitar el Museo Regional, así como caminar hasta Whiffen Spit, que es una parte natural en donde en los días de marea alta se pueden ver a las focas comiendo los salmones y otros peces que el agua ha traído hasta allí.
También se recomienda ir al Parque de Sooke Oriental, que tiene un gran tamaño y está muy cerca del centro de la ciudad. Allí los visitantes se encuentran con más de cincuenta kilómetros de senderos que los llevan a través de bosques espesos, naturaleza exuberante y costas rocosas; que a pesar de que no son tan famosos, si son considerados como algunos de los mejores de toda esta parte de Canadá.