Brasilia, la capital federal de Brasil, es una ciudad que encontrarás fascinante si te gusta la arquitectura moderna, ya que tiene una buena cantidad de construcciones que vale la pena ver. La ciudad, que es una de las sedes de la Copa Mundial de Fútbol, tiene rincones construidos con diseños de vanguardia que no dejan de lado su belleza, siendo uno de ellos el Palacio da Alvorada.
Este sitio fue diseñado por el arquitecto brasileño Oscar Niemeyer, quien es considerado como uno de los más importantes en el desarrollo de la arquitectura moderna. El palacio fue hecho entre los años 1957 y 1958, siendo el primero del gobierno que fue hecho en la entonces recientemente designada como capital federal, y es reconocido por su simplicidad y su modernidad.
El Palacio da Alvorada es la residencia oficial del Presidente de Brasil, habiendo sido Juscelino Kubitschek el primero en vivir allí, ya que gobernó entre los años 1956 y 1961, y quién le dio el nombre gracias a una de sus citas más famosas que dice: “Qué es Brasilia, sino la alborada de un nuevo día para Brasil?“. Este lugar ha sido declarado como Patrimonio Nacional Histórico de Brasil.
El área total de este palacio es de unos 7.000 metros cuadrados que están distribuidos en tres plantas que son el sótano, la planta baja y la segunda planta. En los alrededores, siendo también parte del palacio, hay una capilla y un helipuerto, y dentro de la construcción como tal hay facilidades tan impresionantes como un teatro para ver cine, un centro médico y un salón de juegos.
Este palacio se ha convertido a través de las décadas en el símbolo del movimiento de la arquitectura moderna del país, además de ser una muestra de la nueva cultura y de la tecnología. Una de las partes que más te llamará la atención es su fachada, que tiene unas columnas de mármol que se reflejan en el vidrio que cubre la edificación y en el agua que está en frente, siendo un paisaje que se te quedará en la memoria.
Fotografías de Palácio do Planalto, Andréia, ricardomoraleida.