Fundamental el turismo solidario

Estamos en el mismísimo cuerno de África, rodeados por Eritrea, Etiopía, Somalia y el abundante Mar Rojo. Como casi todos los países de la zona, la República de Yibuti es una tierra de opuestos, de contrastes, de sorpresas agradables y también descorazonadoras. Es un lugar para aventureros, para solidarios, para cooperantes, para amantes de África.

El destino es único, como una especie de puente entre el continente negro y los países árabes y podemos convertir el pequeño país en el campamento base para investigar por los alrededores, no olvidéis que estamos entre Yemen y Etiopía y que las posibilidades para el viajero curioso son infinitas.

Por lo general debemos olvidar el punto comodón, como decía al principio este es un viaje duro, para viajeros experimentados, de esos a los que les gusta conocer lugares muy auténticos. Eso no significa que no existan sitios muy dispares y también adaptados a un turismo más elitista. Ello es debido, primordialmente, a los fondos marinos de un Mar Rojo que baña Yibuti y que brinda experiencias de buceo impresionantes.

Lago Assal

Además, la presencia de la US Army es prácticamente constante, con lo que también se han adecuado lugares para el ocio y el esparcimiento de los militares, aunque esto, como comprenderéis es harina de otro costal.

Sin duda el visitante más prototípico de la antigua Somalia Francesa, sea el que está dispuesto a cooperar para ayudar a los yibutianos, afectados por tantas carencias, y el viajero que llega por motivos científicos o ecológicos. No se puede dejar de visitar algunos parajes imprescindibles, como es el caso del Lago Assal o el Volcán Ardoukoba, en trámites para ser incluidos en la Lista del Patrimonio de la Humanidad de la Unesco. Eso sí, ojito con las temperaturas, que en la época veraniega (mayo-septiembre), pueden pasar de los 45ºC.

Fotografías de US Army Africa, JigsawScott, DVIDSHUB, Blofeld of SPECTRE,