Şirince, que también es conocida como Kirkince o Çirkince, es una población que se encuentra en la provincia de Izmir, en la región del Egeo, en el occidente de Turquía. Aunque esta población tiene aproximadamente sólo seiscientos habitantes es un gran atractivo local porque mantiene su ambiente tradicional y es reconocida por muchos como la Toscana de este país.
Esta ciudad se encuentra a unos seis kilómetros de la importante población de Selçuk, y empezó a ser poblada cuando Éfeso fue abandonada en el siglo decimoquinto, pero la mayor parte de la arquitectura que se puede ver allí data del diecinueve. La forma más fácil de llegar hasta allí es en un minibús desde Selçuk que sale cada hora en cada dirección.
La ciudad de Şirince está en las colinas de esta parte del país y sus casas de color blanco se mezclan con los olivos y los viñedos de los alrededores. Y este sitio es famoso por sus vinos y por su arquitectura, y es perfecto pasar un fin de semana o un par de días allí, dando un paseo por sus calles tranquilas y disfrutando del ambiente lejano a la gran ciudad.
Un buen número de casas locales han sido renovadas y abiertas como lugares de hospedaje para los viajeros que llegan hasta allí, así como restaurantes con delicias locales. El mejor plan para los visitantes es caminar por las calles tranquilas donde juegan los niños, ir a las bodegas a probar los vinos frutales locales y disfrutar de comidas y bebidas en las hermosas terrazas locales.