Ikaruga es una población que está en el distrito de Ikoma, en la prefectura de Nara, en el centro de Japón, que es reconocida por su larga historia con el Budismo. Esta historia la puedes ver reflejada en el área de Hōryū-ji, en donde hay una serie de monumentos de esta religión, y que ha sido escogida como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco.
Hoy te voy a hablar de una parte de este complejo, que es llamada Hokki-ji, también conocida como Hoki-ji o Hōki-ji, y que es un lugar con una arquitectura típica de la región, lo que hace que sea muy visitada por los turistas. En el pasado este sitio era conocido como Okamoto-dera y Ikejiri-dera, y fue hecho en honor a Avalokitesvara, que es el bodhisattva de la compasión, y uno de los más venerados de algunas corrientes del budismo.
La ciudad en la que se encuentra este templo ha sido durante muchos años el punto de referencia del budismo en Japón, y tiene una buena cantidad de ellos, por lo que también es un punto de peregrinación para los practicantes de ella. Este lugar lo encuentras en las laderas en una colina hacia el nororiente de la edificación de Hōryū-ji.
Se dice que que Hokki-ji fue hecho sobre las ruinas del palacio Okamoto no Miya, que fue el lugar en el que el Príncipe Shotoku recibió su parte de su educación sobre esta religión y que dejó escrito en su testamento que en este sitio debería construirse un templo. Algunas excavaciones han concluido que efectivamente en este sitio existieron construcciones anteriores, pero no se ha podido especificar ni de qué tipo ni de qué época.
Esta construcción fue hecha originalmente en la primera parte del siglo séptimo, en el año 638, aunque algunas de sus partes son reconstrucciones de las originales como su salón de lectura que fue vuelto a hacer en 1694 y el salón Shoten-do que es de 1893. El mayor atractivo que puedes ver allí es su pagoda de 24 metros de alto y de tres plantas que es la más alta de Japón, además de ser la más antigua de su estilo en todo el país.
Fotografías de mith17, kazuaki.h, 663highland.