El Palacio Real de Caserta, que es conocido en italiano como Reggia di Caserta, es un lugar que solía ser la residencia real en esta ciudad de la región de Campania, hacia el sur de Italia. Este lugar es realmente impresionante y hace parte de unos paisajes hermosos, que han hecho que sea uno de los sitios más visitados de esta parte del país, perfecto para los que quieren sentirse parte de la nobleza por un momento.
Este palacio fue construido por el rey Carlos VII, perteneciente a la dinastía Borbón-Dos Sicilias para que fuera el lugar más importante del nuevo Reino de Nápoles, y que estuviera a la altura de otros sitios de la realeza europea, especialmente a Versalles. El 20 de enero de 1752 se puso la primera piedra de este complejo, que fue hecho por el arquitecto italiano Luigi Vanvitelli, que se hizo famoso por su estilo barroco que fue transitivo hacia el neoclasicismo.
El Palacio de Caserta tiene unos 44.000 metros cuadrados de extensión que tiene dos fachadas iguales, una estando en frente del hermoso parque local y la otra al patio de armas. Ya en su interior una de las características principales es su Scala Regia, o escalera real, que tiene 117 escalones y que tiene todos sus detalles y decoraciones hechos en mármol de diferentes tonalidades.
En el interior también se puede ver la Capilla palatina que tiene una construcción parecida a la del Palacio de Versalles, los apartamentos reales que eran los sitios de residencia de la familia real, y que se destacan pos sus estilos imperiales y rococó, con decoraciones hechas de varios minerales como el mármol y con detalles hechos de oro puro.
Después de visitar el interior, aconsejo ir al parque que es uno de los jardines reales más hermosos y destacados del continente europeo, en el que se destacan sus esculturas, el diseño paisajístico y el conjunto que forman con el complejo. Allí se puede visitar el jardín italiano y el Passeggio, que es un camino de más de tres kilómetros de largo que tiene fuentes, cascadas, esculturas y plantas.