Ana Frank

Entrada Casa de Ana Frank. Foto Tomada por Jonnymar

El Diario de Ana Frank y las historias que contiene le pusieron un rostro y nombre al drama que vivieron millones de personas durante la ocupación Nazi a Holanda y la Segunda Guerra Mundial. Precisamente la casa donde Ana y su familia se escondieron para evitar ser enviados a campos Nazis es uno de los atractivos turísticos de gran importancia en Ámsterdam.

Después de la publicación del Diario de Ana Frank, varios turistas empezaron a visitar la casa, en la que se escondieron de la persecución Nazi Ana, sus padres, su hermana y otros cuatro judíos; y los empleados de la oficina que allí quedaba les mostraban todo de manera informal. Algún tiempo después, tras evitar la demolición del lugar y adjuntando la casa siguiente, el museo abrió sus puertas en 1960.

El 28 de septiembre de 1999, la Reina Beatriz de los Países Bajos reabrió el museo, después de ser remodelado para ofrecer más servicios y comodidades a los visitantes, entre los que incluyen cafetería, librería y ampliación de los salones de exhibición.

Ana Frank

Estatua de Ana Frank en Ámsterdam. Foto Tomada por Jonnymar

La visita por este museo tiene una duración aproximada de 1 hora y se hace con ayuda de un folleto que se encuentra a la entrada, no hay visitas guiadas. Allí, además del diario de Ana, se pueden ver cartas, tarjetas postales, fotos, documentos oficiales, libros y otros objetos de uso diario de las personas del escondite, que fueron recolectados por Otto Frank, padre de Ana, tras volver y sobrevivir al campo de concentración Nazi de Auschwitz, Polonia.

El precio de entrada al Museo Ana Frank es de 7.50 euros, y a él se puede acceder fácilmente en tranvía o autobús. Las entradas también se pueden adquirir vía Internet para así evitarse las largas filas para su compra.