Radovljica es una ciudad que está en el norte de Eslovenia en la región de Alta Carniola, que poco a poco se ha convertido en todo un destino turístico tanto para los locales como para los extranjeros por la historia que se puede ver en sus calles como por los paisajes naturales que se pueden ver allí, además de las buenas facilidades que ha desarrollado con el paso de los años para el turismo.
Esta ciudad se encuentra a un poco más de cuarenta kilómetros al noroccidente de Ljubljana y hasta allí se puede llegar por la autovía A2, así cómo está a ocho kilómetros al suroriente de Bled. Hasta allí también se pueden llegar en autobuses que salen de las poblaciones cercanas en el norte del país, en viajes que no toman más de un par de horas y en vehículos que son bastante cómodos.
La encantadora población de Radovljica está en las orillas del río Sava, muy cerca de la unión de dos de los ríos más importantes de esta parte de Eslovenia. Uno de los lugares que se recomienda visitar allí es el centro del casco antiguo, en donde se puede ver un memorial dedicado al famoso dramatista Anton Tomazh Linhart, quién fue una de las personas más destacadas en su campo y que nació en esta población.
En este centro histórico también se pueden ver varias casas hermosas que datan del siglo dieciséis, muchas de las que fueron convertidas eventualmente en museos. Entre ellas recomiendo visitar la que está en el número 33 de la plazoleta Linhart, en donde hay una galería y está la oficina de registro, y los turistas no se pueden ir sin visitar el Castillo Thurn, en donde está el museo de apicultura que es uno de los mejores del país, así como su biblioteca que es muy moderna.