Eslovaquia tiene nueve parques naturales en los que los visitantes tienen la oportunidad de visitar las maravillas de flora y fauna que tiene su variado terreno. En el centro hacia el norte del país está el Parque Nacional Tatra, que está ubicado en las montañas del mismo nombre que comparte con Polonia, y en donde está el pico de mayor altura del país.
Este parque se encuentra en las cercanías de la población Vysoké Tatry, que se encuentra muy bien conectada al resto del país por la red ferroviaria, y así se puede tomar un tren desde la capital Bratislava o desde Košice, entre algunas otras. También es posible llegar desde Praga en un tren nocturno o en automóvil desde Austria y desde otras ciudades de República Checa.
El Parque Nacional Tatra es el encargado de proteger el área de las Tatras Occidentales y Orientales, cubriendo un área de 738 kilómetros cuadrados, así como una zona de reserva en los alrededores de 307, para tener un total de 1045. Este es el parque más antiguo de Eslovaquia, habiendo sido establecido en 1987 y allí está el punto más alto del país, que es el pico Gerlachovský štít, que está a 2.655 metros de altura sobre el nivel del mar.
Allí se pueden encontrar más de cien lagos de montaña, siendo el más grande Veľké Hincovo pleso, que tiene un área de 0.2 kilómetros cuadrados y que tiene 58 metros de profundidad, siendo también el más profundo. Un gran porcentaje de este parque está cubierto de bosques, principalmente de varios tipos de pinos, así como de unas 1.300 especies de plantas vasculares.
Entre los animales presentes en este sitio hay 115 especies de aves, 42 de mamíferos, 8 de reptiles y 3 de anfibios, que se pueden ver en un paseo por allí. Y la mejor forma de recorrerlo es caminando, ya que tiene más de 600 kilómetros de senderos, y en bicicleta, ya que hay 16 caminos bien marcados para los que practican este deporte.
Fotografías de Martin Baran, PolandMFA, Adam Baker.