Dalí es una población que se encuentra en la prefectura autónoma de Dalí Bai, en la provincia de Yunnan, en el sur de China. Esta población es una de las tres ciudades antiguas en esta parte del país y tiene una historia que data desde los siglos octavo y noveno, y que pasa por el Reino de Dalí entre los años 937 y 1253, por lo que tiene varios lugares turísticos para visitar.
La ciudad se encuentra entre la Montaña Cangshan en el occidente y el Lago Erhai en su parte oriental, y se destaca por sus grandiosas murallas, así como por sus casas de arquitectura típica de la etnia local Bai, que junto a sus alrededores naturales, hacen que los paisajes sean uno de los mayores atractivos para los turistas tanto del resto del país como de otros países.
Según dicen los historiadores, la ciudad de Dalí era la puerta de entrada a la Ruta de la Seda en China, y en otros tiempos también fue el lugar donde estuvo el gobierno del país y de la provincia. De la muralla de seis kilómetros de largo y de 7.5 alto, en la actualidad se pueden ver partes como las Torres norte y sur que fueron restauradas hace algunas décadas.
Además de las típicas casas de la etnia Bai, recomiendo ir a caminar por las calles empedradas en las que parece que el tiempo se hubiera detenido. También se pueden ver edificaciones con techos verdes grisáceos, talleres de diversos tipos de artesanías, iglesias y templos que tienen un toque antiguo. Y para terminar la visita se puede ir a la nueva Foreigner Street en donde se pueden comer platos típicos locales y hacer la tradicional ceremonia del té, que consiste en tres tipos de esta bebida; el dulce, el amargo y el final.
Fotografías de das farbamt.