Curitiba ya tiene una historia con la Copa Mundial de Fútbol, ya que fue una de las sedes de la que ya se hizo en el país en 1950. Esta ciudad, que es la capital y la más grande del estado de Paraná, en el suroriente de Brasil, es hoy en día una de las más visitadas por los turistas, y más ahora cuando volverá a ser la protagonista de este encuentro de todo el planeta.
Allí está ubicado el estadio Arena da Baixada, que es llamado oficialmente como el Joaquim Américo Guimarães, en el barrio de Água Verde. Este lugar fue construido en donde estaba antiguamente el depósito de armas del ejército brasileño en los años 30s, y con el tiempo sufrió algunas renovaciones, siendo la más importante la de 1999, que lo dejó como lo puedes ver hasta el día de hoy.
Arena de Baixada es el hogar del Atlético Paranaense y es considerado como uno de los más modernos de todo el país, aunque se le tuvieron que hacer unas cuantas modificaciones para el Mundial de 2014. Entre estas renovaciones están algunas como la adición de nuevas sillas para hacer que quepan unos 40.000 espectadores y poner un techo para ayudar con las condiciones de calor de la ciudad.
Después de algunos problemas y unos trabajos que se atrasaron hasta poco tiempo antes del inicio del torneo, el estadio terminó con una capacidad de 41.456 espectadores en sillas que están protegidas de la lluvia por el moderno techo que tiene. Este sitio lo puedes encontrar un poco hacia el sur del centro de la ciudad, por lo que se puede caminar hasta allí desde varios de sus atractivos principales, como lo es la avenida Sete de Setembro.
Una de las grandes ventajas de este estadio es su cercanía a sitios de alojamiento, restaurantes, puestos de comida y buenos lugares de vida nocturna. En este sitio se jugarán los partidos entre Irán y Nigeria del 16 de junio, entre Honduras y Ecuador del 20, entre Australia y España del 23, y entre Argelia y Rusia del 26.
Fotografías de Brazilian Government.