La capital de Argelia, Argel, tiene uno de los centros históricos más hermosos del norte del continente africano y como te imaginarás está lleno de joyas que no te puedes perder en tu viaje turístico por allí. La parte antigua, conocida como Kasbah, fue construida durante el gobierno del Imperio Otomán durante el siglo diecisiete.
En esta parte de la capital argelina puedes encontrar la Mezquita Ketchaoua, que está en la parte más baja de este centro histórico. La hermosa construcción está ubicada en la primera serie de las muchas escaleras que hay en esta parte de la ciudad y es reconocida como el símbolo de las épocas precoloniales.
Originalmente, esta mezquita fue construida a principios del siglo diecisiete, en el año de 1612, pero a mediados del diecinueve, durante las épocas del gobierno francés, fue convertida en la Catedral de San Felipe y así se conservó hasta hace pocas décadas. En 1962 volvió a ser mezquita, pero a pesar de su conversión, ha logrado mantener el encanto y la grandeza que tuvo desde su construcción.
La Mezquita Ketchaoua es uno de aquellos sitios que no te puedes perder en Argel, y posiblemente no te lo perderás porque es tanto su tamaño y su hermosura, que la podrás ver hasta desde la distancia. En una visita a ella con lo primero con lo que te encontrarás es con veintitrés escalones que te llevan hasta la entrada, a una preciosa puerta que está decorada con hermosos diseños y columnas de mármol negro.
En su fachada ya podrás ver la gran mezcla entre los estilos arquitectónicos Morisco y Bizantino que la hacen única. En el interior puedes ver espacios con arcos y bóvedas, cámaras con hermosos diseños, minaretes, techos con tallados de diseños árabes, y columnas de mármol blanco, siendo un gran lugar para conocer más de la historia local.
Fotografías de FlickreviewR, Blog brahmapoutre, Tonton Jaja, Vikoula5.