Dos veces al año, a principios de julio y a mediados de agosto, Siena se transforma y se adapta para acoger a miles de turistas que llegan con el anuncio de la celebración de las carreras de Il Palio di Siena, un acontecimiento que se produce en la ciudad de la Toscana desde tiempos del medievo.
Sin duda es la carrera de caballos más importante de Italia y la parafernalia y puesta en escena que se desarrolla alrededor de este insólito acontecimiento, que tiene lugar en la plaza más importante de la ciudad, sólo contribuyen a prestar al espectáculo mucha mayor singularidad y colorido.
La costumbre de organizar competiciones hípicas en las calles de las ciudades italianas se remonta hasta el siglo XII, aunque dicen que El Palio se produjo como conmemoración a la Batalla de Monteperti, que ponía fin al asedio de los florentinos sobre Siena.
Sea como fuere su origen histórico, la verdad es que trajes, abanderados, fanfarrias, pasacalles, caballos y jinetes componen un espectáculo de características inolvidables. Además estamos hablando de una de las carreras de caballos más antigua del mundo, según otros expertos que, a su parecer, entienden que no existen muchas competiciones hípicas anteriores a la que se lleva a cabo en la Piazza del Campo.
Como ocurre con otros espectáculos en los que se utilizan animales, como es el caso de los sanfermines en España, existe una corriente contraria al maltrato animal que supone la carrera, debido al estrés al que se somete a los caballos, el esfuerzo y los accidentes que en ocasiones acaban con la vida del animal.