Dicen que se trata del tatarabuelo del fútbol europeo y de hecho existen grabados en que se muestran partidos de Calcio Storico Fiorentino fechados a mediados del siglo XVII. Hoy es todo un espectáculo que sobrevive al paso del tiempo y que sus jugadores continúan practicando en medio de toda una parafernalia que ha llegado a valerle el sobrenombre de Fútbol del traje de librea (calcio in livrea).
El nombre de esta disciplina deportiva llega directamente de la lengua latina y dicen que la Piazza de la Santa Croce de Florencia es su realmente su epicentro, su ombligo, el lugar sagrado para todos los practicantes de Calcio Storico y, entre ellos, se incluyen personajes tan nobles como Leonardo da Vinci y Nicolás Maquiavelo.
Cuando la Toscana acabó en manos de Austria, la identidad de los florentinos se fue diluyendo poco a poco y el calcio storico dejó de ser el deporte nacional. Fue el nacionalismo mal entendido del fascismo italiano el que devolvió el deporte al pueblo, aunque con unas reglas más violentas.
En la actualidad, los encuentros más importantes se celebran en el mismo sitio histórico de Florencia, en esa Piazza Santa Croce, donde los equipos rojo, blanco, verde y azul, se disputan la victoria en esa mezcla de rugby, fútbol, boxeo… Pero antes y después de comenzar, también existe espectáculo en los desfiles y bailes de época, que atraen a buen número de turistas.