Llegan al pueblo cada seis años, así que los habitantes de esta localidad de Castellón cogen las fiestas del Sexenni con muchas ganas. Se encargan de rendir homenaje a la Mare de Déu de Vallivana, por un detalle que la Virgen tuvo con los morellanos del siglo XVII, cuando dicen que los libró de una peste asoladora allá por 1672.
Se sabe la fecha con tanta exactitud porque cuenta la leyenda que, desesperados por la virulencia de la terrible enfermedad, los habitantes de Morella decidieron subir a la Virgen de Vallivana al pueblo y, la trajeron desde su ermita, a unos 20 kilómetros de la localidad. Fue llegar la imagen y remitir la plaga, algo que quedaría grabado en el imaginario popular.
Este año las fiestas del Sexenni han sido declaradas de Interés Turístico Nacional y hasta el próximo 28 de agosto tendremos tiempo de disfrutar de ellas. Se recomienda con especial dedicación, que se pasee por las calles del pueblo, engalanadas con hierbas aromáticas y enramadas, unas especies de guirnaldas floridas de papel, con las que decoran las puertas, ventanas y balcones de los edificios.
No podemos tampoco faltar a las danzas de los gremios, los tejedores, los labradores, los torneros y la Danza de los Oficios, nos ofrecerán un espectáculo que nos llega prácticamente intacto desde el siglo XVII. El otro gran espectáculo es el del desfile de los gigantes y cabezudos, una procesión que fascina a grandes y pequeños.
Fotografías de Vicentin48, Columbusalbus.
