Los pueblitos más tradicionales de China, aquellos en donde la vida es mucho más tranquila y te puedes imaginar como en el pasado los viejos se sentaban a fumar pipa y a ver pasar los días. Hay dos pequeñas villas, en la provincia de Anhui, en el oriente del país, llamadas Xidi y Hongcun que son de las más típicas que podrás encontrar en él.
Estas pequeñas poblaciones fueron escogidas como Patrimonio de la Humanidad y son consideradas como algunas de las más representativas de esta provincia. Xidi fue empezada a construir durante el reinado de la primera dinastía Song, entre los años 960 y 1127, siendo considerada como un lugar museo, en el que hay alrededor de 124 residencias antiguas y tres salones ancestrales.
En esta pequeña población, que está rodeada por unas hermosas colinas verdes y que tiene dos corrientes de agua pasando por el medio, tienes la oportunidad de ver tres estilos de tallados que se hacían en ladrillos, en madera y en piedras. Las figuras incluyen pájaros, flores, plantas y otros animales que están en los marcos de las puertas y en las columnas de las construcciones, entre otros sitios.
A unos diez kilómetros hacia el nororiente de esta ciudad, encuentras la villa de Hongcun, que es reconocida como uno de los escenarios chinos más hermosos porque está a una altura en la que es fácil ver nubes y niebla por sus calles. Allí puedes caminar por pequeñas calles que están empedradas y que tienen a cada uno de sus lados casas de color blanco que tienen techos negros que terminan en punta.
En este sitio tan pintoresco puedes ver alrededor de 137 residencias tanto de la dinastía Ming como de la Qing. Muchas edificaciones locales están abiertas al público como el Palacio Imperial, el Salón Chengzhi y otras en donde puedes ver vigas y paneles de madera en donde también hay hermosos y complicados tallados de figuras de la naturaleza y de escenas de la mitología china.
Fotografías de Montblanc.tins, llee_wu, Jenny NLF, h2ooo2h.
Foto de portada de CGTN.