Actor maquillado de la Ópera de Pekín
China se ha ganado la primera posición en el ranking de los países con más tesoros inmateriales en el catálogo de la Unesco y ello ha sido gracias a sus nuevas incorporaciones: La acupuntura, la moxibustión y la Ópera de Pekín.
Con estas nuevas declaraciones, conseguidas el pasado 16 de noviembre, el gigante asiático se afianza en su posición frente al mundo, no sólo como futuro dios económico, sino como lo que siempre ha sido: cuna de Cultura y Ciencia para la Humanidad.
Los chinos ya habían conseguido que la Unesco inscribiera algunas aportaciones de indudable valor a esa lista, entre las que destacan la caligrafía china, el arte del papel recortado, las artes regong de los monjes budistas, la xilografía, la sericultura, la ópera tibetana, el khoomei (arte mongol del canto)…
Ahora le ha tocado el turno a dos disciplinas muy arraigadas en la medicina tradicional china –la acupuntura y la moxibustión- y a la Ópera de Beijing. Las tres aportaciones perviven en nuestros días y son practicadas en otros puntos del mundo (en el caso de las dos prácticas curativas) y admirada por millones de amantes de las Artes Escénicas, en el caso de la manifestación artística pekinesa.
La Ópera de Pekín se instauró a mediados del siglo XIX, sobre la base de las tradiciones operísticas de las provincias de Hubei y Anhui y conjuga la acrobacia, el canto, la música, la danza, la pintura, la declamación y las artes marciales.
Escena de la Ópera de Beijing
Con más de 1000 piezas en su repertorio, resulta ser la más popular de las formas de representación clásica de China. Los relatos históricos sobre enfrentamientos militares y políticos llenan una escena minuciosa y percutiva, en la que el maquillaje elaborado ayuda a distinguir a unos personajes muy definidos.
Por otra parte, la inclusión de la acupuntura y la moxibustión sirve de reconocimiento a dos prácticas muy extendidas entre los amantes de la medicina alternativa. Ambas terapias pueden usarse por separado aunque en la mayoría de los lugares se usan combinadas.
La moxibustión se sirve del polvo de la artemisa (planta medicinal), para calentar puntos estratégicos del cuerpo humano. El polvo suele quemarse directamente sobre la piel del paciente y bajo unos vasos-ventosa de cristal.
Una vez caliente las zonas tratadas y estimulada la circulación sanguínea, el terapeuta aplica las agujas de acupuntura en los puntos energéticos adecuados.
Con estas incorporaciones China suma 28 aportaciones a la lista del Patrimonio Inmaterial Universal de la Unesco. Destacar que también tiene incluidas varias manifestaciones en peligro de desaparición: los juncos (veleros chinos), el Año Nuevo de Quiang y el arte de los tipos móviles en la imprenta.
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