Casas antiguas, extensos pastizales suaves de color verde profundo y corrientes de agua, son algunas de las características de los paisajes de las pequeñas ciudades de Suiza y que las convierten en un excelente punto de visita. Si quieres ver esto recomiendo ir a la pequeña villa de Langnau im Emmental, que está en el distrito de Emmental, en el cantón de Berna, en el centro del país.
Esta población es realmente pintoresca, hasta el punto que cualquier fotografía que se tome allí es digna de tarjeta postal, y está ubicada en medio del valle de Emmental. Su mercado hizo que se convirtiera en uno de los sitios más importantes de los alrededores, además de que tiene una gran ventaja y es que es uno de los sitios más soleados de Suiza, con muy poca presencia de neblina.
Langnau, cómo se le conoce popularmente, tiene unos paisajes increíbles que están hechos para ir a disfrutar de unos días en la tranquilidad del país, también considerando que tiene un poco menos de 10.000 habitantes. En este sitio se pueden hacer actividades para desestresarse y salir de la rutina de las grandes ciudades, empezando por caminatas por las suaves colinas que hay en sus alrededores.
Si se quieren hacer más cosas al aire libre se puede hacer ciclismo, senderismo, viajes en globo de aire caliente, paseos a caballo y hasta canotaje por las corrientes de agua locales. En la plazoleta principal de la población se encuentra la oficina de turismo en donde se pueden pedir mapas de los senderos de los alrededores así como preguntar las actividades que se realizan en la temporada en la que se está allí.
Y es que en esta ciudad se hacen festivales de jazz, de cómics y de pintores, así como conciertos que van desde aquellos de música clásica hasta algunos de rock. La cultura local también se vive en la hospitalidad y tranquilidad de sus habitantes, así como en los mercados pequeños de los días viernes y los más grandes que se hacen seis veces al año.
Fotografías de Roland Zumbuehl, DidiWeidmann, Ginkgo.