La imagen de un carnaval pletórico de tropicalismo prevalece, en parte a que uno de los más importantes del mundo y sin duda el más difundido es el de Rio de Janeiro. La universalidad del festival carioca imprime carácter a la palabra ‘carnaval’ que, no obstante, es una celebración que se perpetúa desde la tradición pagana en casi todos los países del planeta.
Antes de la Cuaresma cada lugar tiene su celebración más o menos sonada y aunque en el caso de Basilea el clima no se ajuste a lo que el imaginario popular presupone, la realidad nos dispone un carnaval muy diferente y hasta cierto punto exótico.
En la ciudad universitaria más vieja de Suiza, unas 20.000 máscaras participarán en uno de los desfiles más espectaculares de la Europa Central.
Unos días antes de Cuaresma y a partir de que el reloj de las campanadas de la 4 de la madrugada, un pelotón de tamborileros y flautistas componen el desfile de charivari. La música llega a cada rincón de las antiguas callejas de la vieja ciudad, tocada por esos personajes que alumbran las frías noches con las lamparitas que portan en sus cascos.
El desfile del Fasnacht de Basel resulta un imprescindible dentro de las festividades de Europa, con sus grandes cabezudos y el maravilloso entorno de una ciudad de frío invierno y arquitectura singular.
