Vista de San Petersburgo con la Catedral de san Isaac. Foto tomada por Lite

San Petersburgo, con un área metropolitana de 5.85 millones, es la segunda ciudad más imporante de Rusia y una de las de mayor tamaño en el continente europeo.

El centro de esta ciudad rusa fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, debido a sus innumerables muestras de arquitectura neoclásica y barroca, entre las que se encuentran varios templos que, a pesar de haber sido utilizados como almacenes en la era soviética, se mantienen en excelentes condiciones.

Vista de la Plaza del Palacio desde el Palacio de Invierno. Foto tomada por JasonRogers

Entre estos templos se destaca la Catedral de San Isaac, que es famosa por su gran cúpula dorada, de 21.8 metros de diámetro y para la que se utilizaron 100 kilos de oro, que se ve a la distancia entre varios edificios señoriales sobre el Río Neva.

Además de su impresionante arquitectura, los turistas visitan esta ciudad rusa durante los meses de mayo, junio y julio para presenciar las “noches blancas”, en donde la oscuridad nunca llega y pueden ver los puentes levadizos funcionar en horas de la madrugada.