Palacio de Khansarai en Shaki. Foto tomada por Grandmaster

Shaki es una ciudad ubicada al noroccidente de Azerbaiyán, en la región del mismo nombre. Muy pocos extranjeros visitan más allá de Baku, capital de este país, sin saber de la clase de destinos que se pueden perder. Esta pequeña ciudad tiene una gran cantidad de atractivos históricos, entre los que se destaca el Palacio de Sheki Khans o Khansarai, que es una magnífica pieza de la arquitectura islámica.

Allí existen muchas posibilidades de hacer caminatas en la montaña que se encuentra casi intacta de la mano del hombre, en donde los paisajes son interminables y en ellos mismos son una razón más que suficiente para visitar esta ciudad. Pero uno de los mayores atractivos es el ritmo de vida relajado que se hace evidente en el mercado central y en los salones de té.

Caravanserai en Shaki. Foto tomada por AudreyH

Además de disfrutar de los paisajes y caminar por las calles empedradas, existen dos lugares que los turistas no se pueden perder que son el Khansarai y el Caravansarai. Los dos quedan en la misma calle, así que es fácil visitarlas en una tarde. Si se quiere hacer un plan de una tarde se puede empezar con un almuerzo en el patio Caravansarai, después de va colina arriba hacia el Khansarai en donde se puede caminar alrededor del palacio y entonces se puede parar en el salón de té para relajarse un poco en una taza de esta bebida.

El edificio de Caravansarai se utilizaba para que llegaran las caravanas que venían a través del camino de la seda hacia y desde China. Esta era una de las cinco paradas en Azerbaiyán durante los siglos dieciocho y diecinueve y hasta el día de hoy es un lugar donde los viajeros se pueden quedar y comer, así como un lugar en el que se puede ver una arquitectura maravillosa.