Troncones es una villa playera que se mantiene en su estilo típico y que se encuentra a un poco más de treinta kilómetros hacia el occidente de la ciudad de Zihuatanejo, en el estado Guerrero, en el suroccidente de México. En esta población solamente viven un poco menos de seiscientas personas y se ha convertido en un destino para los que quieren experimentar el ambiente tranquilo de esta parte del Océano Pacífico.
Este sitio se encuentra ubicado entre la Riviera Mexicana y las montañas de la Sierra Madre y tanto locales como extranjeros llegan hasta ella para desconectarse del movimiento de las ciudades más grandes. La forma más fácil de llegar hasta allí es haciéndolo hasta el aeropuerto internacional de Ixtapa/Zihuatanejo, desde donde se puede tomar el transporte de algún hotel, un taxi o alquilar un automóvil para llegar hasta la villa, en un recorrido que toma unos cuarenta minutos.
A pesar de que Troncones se ha consolidado como un destino de relajación en el que las playas mantienen ese estilo lejos de los resorts, siendo posible caminarlas todas sin zapatos, allí los visitantes pueden encontrar algunos hoteles de buena calidad, restaurantes en donde se pueden probar unos excelentes platos típicos y sitios que alquilan equipos para hacer diferentes actividades acuáticas, por lo que la diversión está garantizada.
La playa de este sitio tiene apenas cinco kilómetros de largo, pero se ha consolidado poco a poco como uno de los sitios preferidos por muchos para ir a disfrutar de unas arenas finas y un mar que está cálido y que se puede disfrutar durante todo el año. Además es uno de los destinos favoritos para los que practican o quieren aprender surfing, en sus alrededores hay sitios naturales de gran valor a los que se puede ir a hacer senderismo, kayak y observación de aves, entre algunas otras cosas.
Fotografías de kzamani, Tonari no Totoro.