La Basílica de San Ambrosio, que es conocida originalmente como la de Sant’ Ambrogio, es una iglesia que está en la ciudad de Milán en el norte de Italia. Este lugar es uno de los edificios religiosos más famosos de toda esta ciudad italiana, en especial por su arquitectura de estilo medieval, que data del siglo decimoprimero, que fue el siglo en el que fue reconstruida.

La parte exterior de esta iglesia es muy diferente a la de la mayoría de ellas, porque tiene un gran atrio, que es casi tan grande como la basílica, que se extiende hacia el occidente y dos torres que tienen diferentes alturas. La torre sur, que es llamada la de los Monjes, tiene un diseño simple y fue hecha en el siglo décimo, mientras que la del norte es más impresionante y fue construida en el siglo decimosegundo.

El interior de la Basílica de San Ambrosio tiene arte por todas partes, en especial de las épocas medievales. Así se puede ver un sarcófago del siglo cuarto que tiene talladas escenas bíblicas, letras románicas talladas en diferentes sitios, un dosel que está encima del altar y que data del siglo décimo, y un altar del siglo noveno que está hecho en oro, por lo que es impresionante.

Y uno de los detalles que los visitantes no se pueden perder es el Mosaico del Ábside que data de entre los siglos noveno y decimosegundo, que tiene en su parte media un diseño de estilo bizantino, y en los lados otras escenas que se dice son incluso más antiguas. Y se puede seguir el recorrido por el mármol tallado que está en la parte norte de la nave, que tiene escenas basadas en las escrituras de Ambrosio.

Esta Basílica se encuentra en la Piazza Sant’Ambrogio, 15, de Milán y la entrada es gratuita. Allí se puede ir de visita de lunes a sábado de siete de la mañana hasta el mediodía y de tres a siete de la tarde; así como los domingos de siete de la mañana a una de la tarde y de tres de la tarde a ocho de la noche.

Fotografías de Leandro’s World Tour, Giovanni Dall’Orto.