Vormsi es la cuarta isla en tamaño de Estonia y se encuentra ubicada entre la otra isla de Hiiumaa, que es un poco más grande, y la parte continental del país. Todo este lugar, que se llama originalmente Ormsö, se ha convertido en un buen destino en este país para aquellas personas que quieren disfrutar de un poco de playa, de cultura tradicional y de naturaleza en el país.

La única forma de llegar hasta esta isla es en un ferry que sale desde el puerto de Rohuküla, que está a un poco más de cien kilómetros de Tallin y a unos diez de la otra conocida ciudad de Haapsalu. Este viaje, en el que también se pueden llevar automóviles con suficiente combustible porque allí no hay estaciones de servicio, tiene una duración de alrededor de cuarenta minutos.

En el pasado esta isla estaba tanto habitada por suecos como por estonios y antes de la Segunda Guerra Mundial unas 2.500 personas vivían allí. Pero durante la ocupación soviética este sitio estuvo en una zona cerrada de frontera y allí nadie podía permanecer sin permiso del gobierno, lo que llevó a que en la actualidad sus habitantes sólo sean un poco más de doscientos.

El atractivo principal de Vormsi es su naturaleza que es bastante diversa, por lo que se recomienda visitar la Reserva Natural local, que es la encargada de proteger varias especies tanto vegetales como animales, que viven en los diferentes hábitats locales como los bosques, los pastizales costeros y las lagunas. También recomiendo visitar el faro que está en la parte nororiental de la isla y el cementerio, donde se pueden ver cruces celtas que datan del siglo trece.

Fotografías de masterplaan, Kalervo Kinnunen.