La Catedral de Brujas, también llamada la Catedral de San Salvador es uno de los lugares más visitados de esta población del noroccidente de Bélgica, así como uno de esos símbolos que se ven en las fotos panorámicas y cada vez que se habla de esta población. Este templo originalmente no fue construido para ser una Catedral, pero obtuvo ese nombre en el siglo diecinueve, después de estar desde el siglo décimo como una iglesia parroquial.

Esta iglesia, que es la principal de la ciudad, es una de las pocas edificaciones en Brujas que han logrado sobrevivir el paso de los años y todos los sucesos propios de la historia. Sin embargo, si ha sufrido varios cambios y renovaciones, como aquellas de su techo que sufrió grandes daños después de un incendio que sucedió en el siglo diecinueve, con lo que adquirió su nueva torre alta que se puede ver desde varios puntos de la ciudad.

Pero lo más impresionante de esta iglesia no lo ves en la parte de afuera, sino en su interior, donde se encuentran varias piezas de arte que estaban en la destruida Catedral de San Dionisio. A la entrada se pueden ver varios tapices de pares que fueron hechos en Bruselas por Jasper van der Borcht en el siglo dieciocho y que fueron mandadas a hacer por el obispo Hendrik van Susteren.

También se recomienda ver en podio original del siglo dieciséis que está en el coro. La entrada a esta Catedral es gratis, pero para ir a su tesoro si se tiene que pagar un pequeño monto, y está abierta entre abril y septiembre de lunes a viernes de 10 a 11:30 de la mañana y de 2:30 a 5 de la tarde; y entre octubre y marzo de 10 a 11:30 de la mañana y de 2:30 a 4:30 de la tarde.

Fotografías de alecea,Michielverbeek, ricardo.martins, Javier Carro, petermeuris.